SERVICIOS PROFESIONALES PARA EMPRESAS


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jueves, 15 de noviembre de 2012

¿Qué pueden aportar los becarios a nuestra empresa?

Los becarios son una figura de difícil encaje dentro de la empresa en muchas ocasiones. A veces las organizaciones no tienen muy claro a qué se van a dedicar durante el tiempo de aprendizaje que van a pasar con nosotros; en general creo que son poco valorados y no tienen un plan de carrera en la empresa más allá del tiempo imprescindible que dura su beca o su contrato de prácticas. Pero ¿qué pueden aportar los becarios en nuestra empresa?.

No es raro identificar al becario con trabajos o tareas de baja calificación. El becario ha venido a traer el café para todos, que tiene que aprender desde abajo. Este pensamiento es más común de lo que parece en algunas empresas y creo que es un error, tanto para nuestra empresa como para el propio becario. Ambos podrían salir ganado si ejerciera tareas más acordes con su formación.

 

Ante todo ser sinceros en la posibilidad de permanencia

Una de las mayores quejas o razones para el descontento cuando llega un nuevo trabajador en prácticas o becario a nuestra empresa es la posibilidad de quedarse en la empresa.

Seamos claros siempre con los candidatos. Si realmente tienen oportunidades de quedarse lo mencionamos, pero si no es así, mejor no dar falsas esperanzas. A mi juicio es mejor venderles el puesto como una oportunidad de ganar experiencia en un sector, en una empresa, ofrecerles cartas de recomendación o valoraciones positivas en las redes sociales como Linekedin, etc. Algo que les permita poner en valor las prácticas realizadas para conseguir trabajo en otra empresa del mismo tipo.

Muchas organizaciones entran en la rueda de los becarios como una manera de conseguir fuerza productiva económica. Cada poco tiempo se cambia de personal y cuando el personal ha llegado a conseguir la soltura necesaria es el momento de marcharse, y vuelta a empezar con un nuevo candidato. Y no todos asimilan igual, ni trabajan de la misma manera. Lo peor de todo es que las personas que están encargados de su formación acaban poco a poco cansados de tener que explicar siempre las mismas cosas, por lo que poco a poco acaban por prestar menos atención a los becarios.

Joven y tecnológico, pues a administrar la web y las redes sociales

Otra de los tics que son habituales en algunas organizaciones es aprovechar que el becario es joven y tiene una buena relación con la tecnología para que sea el encargado de administrar los contenidos de la página web o llevar nuestros perfiles en las redes sociales. Todavía si están bajo la supervisión de un responsable, al que ayudan y les guía en estos trabajos podemos aprovechar su buena relación con blogs, redes sociales o páginas web, pero siempre turorizados por el encargado de este área en la empresa.

No es lo mismo comentar con tu grupo de amigos en Facebook que llevar la comunicación corporativa de una empresa. Aquí el primero que no debe confundir los términos es la propia empresa. Si le damos tan poco valor a nuestra imagen corporativa, como para que dependa cada cierto tiempo de una persona diferente, creo que no merece la pena mantener un perfil corporativo en las redes sociales.

Ningún becario es igual, aprovechemos su perfil

Sobre todo tenemos que tener en cuenta que ningún candidato es igual al otro. Cada uno tienen unas capacidades distintas y es fundamental hacer un estudio del currículo de cada uno de ellos, así como una buena entrevista personal para que la relación entre ambos sea satisfactoria. Sobre todo ahora que en muchos casos las personas que acceden a los puestos de becarios no vienen sin ninguna experiencia laboral.

Con el número de parados que hay ahora mismo, para el puesto de becario se pueden presentar otras personas que ya cuentan con un cierto currículo, pero por el motivo que sea quieren abrirse paso en otro sector, quieren mejorar en algún aspecto y nuestra empresa les parece interesante, etc. En muchos casos vienen más buscando formación y experiencia que sueldo. Y es mucho lo que pueden aportar a nuestra empresa. Es nuestra responsabilidad saber sacarles partido.

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